Cuando vamos conduciendo, tenemos sensaciones en nuestro cuerpo raras y a las que no estamos acostumbrados. La sensación de velocidad y la gravedad hacen que notemos cambios de presión en nuestro organismo. Para poder evitar esta sensación tan desagradable, te damos unos consejos.
Exceso de velocidad o carretera en mal estado.
Muchas ocasiones esta sensación es debida al estado de la carretera, mal diseñada o con pendientes muy pronunciadas. También si nuestra velocidad es muy elevada, esta sensación en el estomago se incrementa. Deberemos reducir la velocidad en estas situaciones para evitarla.
Comida copiosa y digestión.
Si recién comidos, nos subimos a un coche y salimos de viaje. Nuestro estómago, está trabajando en la digestión. La sangre de la cabeza baja al estómago para trabajar en el proceso de digestión. Todo esto hace que podamos tener sensaciones raras en el estómago si bajamos un puente conduciendo.
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¿Por qué tenemos esa extraña sensación/sensación en el estómago cuando aceleramos cuesta abajo o subimos a una montaña rusa?
Cuando aceleras hacia abajo, de repente sientes una reducción de las fuerzas que normalmente experimentas debido a la gravedad en tus órganos internos (particularmente en el área abdominal donde los humanos generalmente son calamares y chapotean un poco).
Exactamente por qué tenemos ese sentimiento particular es una buena pregunta. Supongo que es a través de la evolución desde la época en que éramos habitantes de los árboles, la sensación nos informaba que nos estábamos cayendo del árbol y necesitábamos agarrar algo rápidamente. Si alguna vez te despertaste repentinamente porque pensaste que te estabas cayendo, la sensación es la misma (eso se llama «sacudida hipnagógica»).
La experiencia es solo momentánea, solo la sientes cuando comienzas a caer, si continúas en caída libre, la sensación es diferente. Los astronautas informan que la sensación de estar en el espacio es como la sensación de estar boca abajo todo el tiempo (principalmente debido al aumento de la presión sanguínea y del fluido cerca de la cabeza, similar al efecto de estar boca abajo, pero menor). pero no reportan una sensación extraña constante en el estómago de otra manera.
Por lo tanto, los pilotos que realizan maniobras solo experimentarían momentáneamente la sensación, a la que probablemente se acostumbren. Y, francamente, la sensación es probablemente bastante agradable en comparación con las otras sensaciones con las que tienen que lidiar los pilotos que realizan maniobras peligrosas.
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